lunes, 2 de septiembre de 2013

Aprobando. O no.

Y a estas horas escribo.
Para decir que mañana a estas horas ya habré aprobado un examen gordo gordo y más largo si cabe. Con el sonido de ballenas en el mar de fondo (viva Spotify).

Para decir que la vida es corta. Para aconsejar, si se me permite la licencia, que las decisiones se van tomando de poquitos a poquitos, sin pensar que una decisión dura para toda la vida. No lo pienses, de verdad, porque mínimo hiperventilas.

Porque somos dueños de nuestro futuro. Y si hoy quiero que mañana cambie algo, tomaré una decisión y la llevaré a cabo. Y si hoy quiero que dentro de un año las cosas hayan cambiado, también podré hacer que eso suceda, porque tengo en mi mano ir consiguiendo logros que me hagan llegar a mi destino. 

Quizá dentro de dos años quiera regresar. Y si quiero lo haré. Porque el espacio se queda donde está aunque el tiempo varíe y las variables hagan lo propio. Pero sabré reconstruir. Y si no se puede, es porque algo mejor tengo preparado, aunque sea una enseñanza. 

"Seamos realistas" es el sinónimo de "esto es lo que hay" y no me gusta la gente que te quiere arrastrar hacia esa actitud, porque probablemente hayan pasado por vivencias que les han escarmentado pero de las que no han sabido sacar nada positivo. Y señores, siempre hay algo positivo. Y no me refiero siempre a lo que se puede palpar. 

Dicho esto, mañana apruebo. Y si no, por algo será. 





(imagen cogida de www.revistasumma.com)

martes, 23 de julio de 2013

Relax

De eso que un día te despiertas, abres los ojos como puedes (que a mí se me quedan pegados) y entonces sabes lo que quieres. 
Es raro, porque normalmente empiezas los días por inercia, pero esta vez estás completamente convencida. 
Y te tiras el día en Babia, pensando cómo hacerlo posible, barajando opciones, estudiando éxitos y no deseados fracasos.
Miras a tu alrededor. Escuchas a tu alrededor. Sentada en mi silla de plástico verde, incómoda como una mala cosa pero ensimismada en la piscina, en el ruodo que pueden hacer los pájaros y en los malditos niños que no pueden parar de berrear y enturbian TU silencio. 
Pero nada te puede parar y tu cabeza parece una locomotora a todo gas. Esto sí, esto no, esto puede, tengo que ponerme manos a la obra. 
Ahora, en un ratito. 
Y de repente son las diez de la noche, y físicamente has tirado tu día a la basura, pero no mentalmente. 
Meditar de vez en cuando está muy bien, pero agota.

Mañana será otro día... y seguiré necesitando agua para despegarme bien los ojos.

jueves, 25 de abril de 2013

Consejos de mi padre (I)

"No madures, no madures nunca, porque luego te pudres. Simplemente, adquiere las responsabilidades que quieras para lograr tus objetivos."

Esta ha sido la respuesta que he obtenido de mi padre cuando le estaba contando lo enfadada que me siento a veces por tomar decisiones que hace dos años no hubiera tomado y que eran muy fáciles de tomar por aquél entonces. Le he dicho: "papá, creo que estoy madurando, no sé si me gusta". Y él me ha contestado con cara de trivialidad lo que ya habéis leído.

No sé si sabéis a qué me refiero. Ese tipo de decisiones absurdas, del día a día, como salir de fiesta o no hacerlo porque sabes que un día de estudio podría suponer un suspenso si hablamos de épocas como estas, y que ese suspenso costaría 400 euros a tus padres en caso de no recuperarlo en septiembre.

Si os habéis sentido identificados conmigo por haberlo sentido en algún momento de vuestra vida, sabéis que el cabreo no es no poder/querer salir, siguiendo con el ejemplo. El cabreo es que no te reconoces. Has cambiado y no sabes en qué momento. Antes las cosas se veían mucho mas sencillas y por tanto eran mucho más sencillas. Y te dices: "eh, tú... tú antes molabas".

De repente te encuentras con 23 años, con una carrera por acabar, sin saber muy bien qué va a ser de tu vida dentro de un año cuando el fin sea palpable, dudando sobre si preocuparte por el día a día en el sentido de hace años (no hacer ni el huevo y pasártelo bien) o preocuparte por aprender cosas y aprobar, para tener el futuro que quieres. Y ves que parte de tus amigos se marcha de la universidad, algunos con curro y otros con planes inciertos, pero al fin y al cabo, se marchan.

Y te das cuenta de que eres la misma persona que hace unos años escuchó una y otra vez cómo le decían que disfrutara de la etapa universitaria, que era la mejor de la vida sin lugar a dudas. Esa misma que dijo "bah, anda que.. ni que seis o siete años se pasaran rápido".

¿Que no? JA.

Mi padre me ha dicho que ahora que lo sé, disfrute del año que me queda, que sabiéndolo se disfrutan muchas cosas más. Pero entre el proyecto y la cantidad de asignaturas que voy a tener, no creo que me quede tiempo ni para socializar con una ameba.

Lo que sí que me ha gustado ha sido lo de "no madures, que luego te pudres... simplemente, adquiere responsabilidades".

No entiendo muy bien el significado profundo que mi padre le ha querido dar, aunque puede que se haya tirado un triple para ver si colaba. Pero intentaré diferenciar bien ambos conceptos, porque puede que el señor que me engendró tenga razón en algo clave y yo aún no me haya enterado.


sábado, 20 de abril de 2013

De óxido y hueso.

Inciso:
Basta que diga que mi blog es alternativo para que deje de serlo. Dos posts en tres días, ¡estoy que me salgo!
Fin del inciso.

Hoy os voy a contar cómo soy capaz de desear que muera el protagonista de una peli y el director de dicha peli, por memos. Memos todos. Joder.

Bien, resulta que ayer Zenu me contó que se había descargado una peli de HAMOR sólo para mí, porque a mí me gustan esas pelis. Yo, que soy una confiada, estuve toda la tarde saltito va saltito viene "Pilícula de amooor!! pilícula de amooor!!!", y así.

Por fin, llegó la noche. Zenu me obligó a romper mi dieta invitándome a un burguer y luego pusimos la peli. "De óxido y hueso" se llamaba. Y digo se llamaba porque ya no existe, dí órdenes contundentes a Zenu de que quemara ese DVD ipsofacto en cuanto terminamos de verla.

Y ahora es cuando digo por segunda vez en la historia de éste mi blog una palabra que me encanta:

SPOILEEEEEEEER!!!!

De Óxido y Hueso (o algo así porque es posible que mi mente ya haya olvidado el título) es una película francesa, del 2012, dirigida por Jaques Audiard, una persona de la que ni voy a buscar información porque seguro que es un gafapasta absurdo y estúpido de esos que creen que han de concienciar a la humanidad con películas estúpidas y absurdas cuyo fondo, según ellos, es tan grande tan grande que nadie más que ellos podrá pillarlo.

Pues bien, Jaques Audiard: váyase usted un poquito a la mierda. Le han dado subvención por esta peli ¿verdad? Seguro, no encuentro otra explicación.

¿Que de qué iba la película? Así, a grandes rasgos, va de un tío, Ali, que tiene la empatía de un cactus y al que de repente le toca cuidar de su hijo de 5 añitos porque su madre drogadicta está en la cárcel. Como es incapaz de conseguir un curro ni aunque sea de mierda porque aunque se lo ofrezcan lo rechaza porque es gilipollas, se pone en contacto con su hermana Ana, una tía que me cayó muy bien porque le arreó una bofetada en un momento dado. Ana, dejándose llevar por el amor hermanil o algo así, lo acepta en su casa -donde cuida cachorritos monérrimos hasta que crecen un poco y se venden-, cuida de su hijo y le consigue un curro de portero en una discoteca petada de putones.

Una noche,  mientras Ali está currando y manteniendo una conversación apasionante con su compañero, que le da consejos sobre cómo frinkarse a los putones del garito cuando salen borrachas del lugar y están desesperadas, se produce una pelea en la que pegan a una tía. Sin ningún tipo de lógica y después de decirle que la han pegado por ir vestida provocando, la lleva a casa dejando de lado su curro. Al llegar, ella le invita a subir aunque resulta que tiene pareja, pero a Ali le da igual y le saluda como si quien sobrara fuera la pareja y no él, y le da el número de teléfono a la susodicha, Stephanie.

Stephanie es una cuidadora de orcas en un zoo y participa en espectáculos donde las orcas dan saltitos en el agua y eso. Un día igual de soleado que trágico, durante el espectáculo, una de las orcas decide que ya está bien de monerías, se enfada mazo y tira la estructura sobre la que estaba Stephanie, con la terrible consecuencia de que ésta cae al agua y la orca le come las dos piernas, pero sólo por debajo de las rodillas. ( Seriously? Si te pilla una orca te come de un bocado, no sólo las piernas!!!)

Durante un rato de la peli, se ve cómo Stephanie se despierta en el hospital, flipa en colores, llora, se deprime y da mucha pena. En serio, da mucha pena. Estuve ese rato entero ojiplática, flipando, pensando en que eso es poco para lo que yo haría si me pasara algo así. Muy turbio el asunto.

Y cuando me estaba empezando a gustar la peli, empiezan a contar cosas de Ali. Como que trata fatal a su hijo y le empuja y se da contra la esquina de una mesa en la cabeza y se la suda, no lo recoge del colegio, le grita por jugar con los cachorros de la tita Ana, consigue un curro de segurata en el supermercado donde trabaja su hermana, la traiciona poniendo cámaras para vigilar al personal sin decírselo, se pega de leches con todo bicho viviente y consigue hacerse odiar hasta límites insospechados. Supongo que esto es lo que quería conseguir nuestro querido director Jaques, claro, pero yo no veo películas para odiar a un don nadie que no tendría repercusión sobre el mundo ni aunque fuera su último habitante.

Un buen día, por otro extraño motivo que tampoco consigo comprender, Stephanie encuentra el número que le dió en su día Ali y le llama. WTF en toda regla. Muy deprimida ella, le invita a su casa, y él llega y al verla en silla de ruedas dice que en su casa huele muy mal.

Aquí comienza una relación con conversaciones que no tienen sentido y son habladas con la misma expresividad de un pez, pero se ven escenas muy turbias en las que sin siquiera darse un beso follan porque ella quiere saber si sigue viva.

Comienza a relatarse a partir de aquí el proceso de superación que lleva Stephanie, DEL TODO ADMIRABLE, pero es que a su lado está Ali y entonces la película se jode.

Cuando ya parece que todo está fantabuloso de la muerte, se produce el despido de Ana del supermercado por coger yogures caducados del almacén y ella se entera de que el soplagaitas de su hermano sabía lo de las cámaras y no se lo había contado. Aquí es cuando lo abofetea y lo echa de casa mientras su marido le apunta con un rifle en la cabeza. ¿Os imagináis mi emoción del momento? Pensé que por fin lo iban a matar. No me creía que yo estuviera pensando aquello.

Con el percal ya formado, Ali decide huir y dejar a su hijo sin siquiera despedirse, y a Stephanie, sin despedirse también. Pero un vuelco en la historia que no es explicado en ningún momento, hace que Ali se vaya a una escuela de boxeo porque, eh, él mola, el boxeo es un deporte de gente excluída de la sociedad, él tiene experiencia en peleas callejeras con apuestas donde los puñetazos son lo de menos, y es todo muy profundo. Así que cuando ya está instalado en la escuela, el niño va a verlo y juegan en la nieve sobre un lago helado, pero como ya hemos dicho que Ali es idiota profundo, deja al niño solo mientras se va a mear, y el niño se cae en el lago y todos lloramos porque pensamos que la persona más encantadora de la película se va a morir. Pero haciendo un alarde de su fuerza Ali rompe a puñetazos el hielo cuyo grosor era de unos 20 cm por lo menos (WTF WTF WTF) y saca al niño, que milagrosamente sigue vivo (esto no se lo cree nadie hombreyá).

A partir de ese momento todo es maravilloso y fantabuloso, su hijo progresa adecuadamente en el hospital, la hermana le perdona, Stephanie también y llega el dinero y la fama a sus vidas porque ya se sabe que un chico tan tan malo, seguro que tiene que triunfar en el deporte que practica. Vamos no me jodas.

Y fin.


Reflexión:

No sé lo que el director quería dar a entender con la película, probablemente haya conseguido en mí la reacción que buscaba, pero no me gustan las historias que hacen creer a la gente que por ser un desgraciado AL QUE LE GUSTA SERLO, ojocuidao, desprendes un halo de misterio y profundidad que te hará triunfar en deportes QUE EL DIRECTOR pinta como marginales, dando igual los valores personales como el cariño, el tacto, la empatía y cosas similares.

POSTUREO SE LLAMA ESTO.

jueves, 18 de abril de 2013

Sinceridades y otras gilipolleces.

Inciso:
Definitivamente, éste, mi blog, se ha convertido en un blog alternativo. Alterna 500 días sin escribir con uno en que escribo. Asumido queda, pues, y no me rayo más con el tema.
Fin del inciso.

Bueno, que yo he venido aquí a hablar de mi libro de las verdades y las sinceridades (llamadas por mí sincerdidades, porque son todas unas cerdas).

A ver, que quede claro:

SINCERDIDAD DISTINTO DE VERDAD
o al menos en mi cabeza

Ser sincero, es decir NUESTRA verdad. Cuando es necesario, no al tuntún. Que esto hay que distinguirlo muy bien.

Decir la verdad, es decir LA verdad. Un hecho, una certeza. Algo quesasí y punto. 

Por ejemplo: 

-Ay, ¡te has comprado un vestido nuevo! (verdad). Parece que estás preñada (sincerdidad sin sentido).

-Ay, ¡te has comprado un vestido nuevo! (verdad otra vez).  Estás guapérrima (sincerdidad con sentido).

(estoy pensando que si te has comprado un vestido y lo estrenas, es obvio que es nuevo, pero venga, no os fijéis en nimiedades)

O:

- Oye Maripuchi, que me dicen que se cuenta que se rumorea, que te ha salido un novio nuevo (verdad lo de que se dice, se cuenta, se rumorea) Mira a ver no sea tan feo como el de la última vez (SINCERDIDAD ABSOLUTA).

Y así todo lo que quieran.

Pues nada, estas son las típicas cosas que se me ocurren en las clases aburridas.

Fin del comunicado.


martes, 5 de febrero de 2013

Welcome Mr. Marshall.

Levantarte todas las mañanas. Abrir twitter. Leer trapos sucios de políticos. Reír o llorar, dependiendo del día. Estudiar. No querer ni encender la tele para no enterarte de más cosas.

Y así todos y cada uno de los días desde hace ni me acuerdo los años.

Bienvenidos a España.

Un país dominado por Alemania. Un país en que la mayoría de los políticos no saben cuánto cuesta un café en una cafetería normal. Un país en que los políticos que sí lo saben son igual de culpables que los que lo ignoran, porque no hacen nada para que los otros lo sepan.

Vivimos en una península con unas cuantas islas, que en realidad parece dividido en 17 con barreras infranqueables.

Los "dirigentes" se preocupan de todo menos de lo que se tienen que preocupar y cuando las cosas no salen como ellos (o sus asesores sin la ESO) previeron, entonces la culpa es nuestra.

Nuestra, porque hemos vivido por encima de nuestras posibilidades. Dejando de lado así que quien hizo eso fue con el consentimiento de un banco que la mayoría de las veces se aprovechó de la ignorancia de la gente.

Nuestra, porque hemos estudiado según nuestra vocación en vez de según las necesidades del país. Dejando de lado que es el país el que se tiene que adaptar a sus ciudadanos y no al revés.

Son pillados con el carrito del helado y la boca con berretes y aún tienen la cara dura de decir "me he comido un helado, pero eso no justifica que el carrito esté vacío... Espera que termino de tragar... Te voy a demandar por injurias y calumnias, que está muy de moda últimamente".

Bienvenidos a España.

Un país donde da miedo pedir la dimisión del actual Gobierno porque ni siquiera tendrías a quién votar.

Un país en que, cuando el Presidente es elegido, sigue saliendo con la bandera de su partido de fondo en vez de con la bandera española. Recuerde, señor, que ha salido elegido Presidente de toda España, no sólo de los que le votaron.

Un país en que la oposición del Gobierno es en realidad una oposición hacia el país entero. No hacen más que joder. Pretenden dar lecciones morales, porque ya se sabe que es más fácil ver la paja en el ojo ajeno que la viga en el propio.

Un país cuyos partidos políticos se dedican a darse de guantazos, a mano abierta, con la que está cayendo. Intentando destituírse y desprestigiarse los unos a los otros, en vez de dejar a un lado la mierda de orgullo que puedan tener (que es bastante poco).

Un país cuyos sindicatos dejaron de serlo hace mucho tiempo.

Bienvenidos a España.

Donde los ciudadanos nos pegamos por defender a los partidos en vez de salir a la calle a obligar a salir a los políticos a la calle, estén donde estén, no sólo en Génova o en Ferraz.

Donde la corrupción nos parecía bien antes porque no nos tocaba de lleno.

Donde estamos empezando a despertar pero nos preocupa más no perder un día de sueldo por hacer huelga por la que nos están liando desde arriba.

Donde le ponemos color político a la huelga en vez de aprovecharla para lo que tiene que ser aprovechada: hacernos escuchar.


....Bienvenidos a España.... Disfrutad de ella, que le queda bien poquito.

jueves, 10 de enero de 2013

Zona de Confort VS Zona Mágica


¿Sabéis? Llevo un tiempo cambiando de sueños. No sé si por estar cansada de ser perseverante. No sé si porque realmente mis gustos están cambiando. No sé si es porque hace mucho tiempo que decidí un sueño y resulta que era pequeña para decidir que mi sueño definitivo era ése. No sé si es porque mi zona de confort se me hace pequeña y necesito un alto en el camino para poder proseguir con él renovada y con más fuerzas que se me han ido cayendo... Pero hoy he visto este vídeo, y se me ha iluminado la bombilla de las preguntas. Y no paro. No paro de preguntarme cosas.



Mirad el vídeo. Detenidamente. Escuchadlo. Mirad los dibujitos cómo molan.


"Es más que probable que la incógnita de lo que quieres para tu futuro permanezca."
¿Cuánto tiempo? ¿Demasiado? No sé si lo aguantaré...

"Trabaja duro. Sacrifícate. Acepta tu destino."
Quien nos lo dice, ¿es gente que habiendo hecho las dos primeras cosas no ha conseguido lo que quería en la vida y le echa la culpa al destino? ¿es gente que no soporta que haya quien luche contra lo que ellos consideran el destino por si acaso les sale bien y tienen que ver cómo ellos mismos no han sabido hacerlo? ¿es gente que permanece en la zona de confort que el vídeo nombra más tarde? Fijáos en el traje de preso que le ponen a nuestro presente después de citar la cursiva anterior... Me parto con lo del cuento de la lechera.

"La forma de conseguir tu meta es soñar con lo que quieres, ponerle fecha de caducidad a tu sueño y luego luchar por alcanzarlo".
Obviamente, es absurdo tener un sueño metido en la cabeza y no luchar por ello. Básicamente porque te amarga tener en mente a todas horas que no lo has conseguido. Así que tienes dos opciones: o luchas por ello y te callas la cabeza mientras lo haces, o te callas la cabeza y buscas otro sueño por el que sí quieras luchar.

"Concepto de Zona de Confort: zona metafórica en la que estás cuando te mueves en un entorno que dominas. En ella las cosas te resultan conocidas y cómodas, SEAN AGRADABLES O NO."
Por favor, salgamos de la zona de confort si realmente queremos, fundamentalmente si nuestra zona de confort no es agradable... ¿Os acordáis de eso de Mejor malo conocido que bueno por conocer? Otro pringao como el del cuento de la lechera, SEGURO.

"Alrededor de tu zona de confort, está tu Zona de Aprendizaje: zona a la que sales para ampliar tu visión del mundo"
Una cosa es que te guste o no te guste salir a verla... pero personalmente, cuanto más conozco mi zona de aprendizaje ¡más me gusta! (y más me lía)

"Más allá de tu zona de aprendizaje, tenemos la Zona de Pánico o la Zona de No Experiencia. Aquéllos que no quieren que la transites (que suelen ser los que no salen) dicen que es la zona en la que pueden sucederte cosas GRAVIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIISIMAS!! (...) ¿Y si te sale mal? ya...pero... ¿Y SI ME SALE BIEN?"
¿Y lo fácil que es decirlo y lo difícil que es hacerlo?

"Esto último lo dicen aquellos que consideran a esta zona la Zona Mágica: la zona en la que te pueden ocurrir cosas maravillosas que todavía no conoces porque no has estado ahí"
Las cosas maravillosas son al fin y al cabo las que todos deseamos, pero siempre queda la esperanza de no tener que salir de la zona de confort y que las maravillosidades te sucedan dentro de ella... ¿Volvemos a intentar jugar con el destino? ¿Pueden pasar cosas maravillosas sin que las busques de un modo u otro? ¿Simplemente siendo receptivo? ¿Ser receptivo no implica salir de la zona de confort? Todo un bucle...

"Al salir (a la zona mágica) lo que ocurre es que extiendes tu zona de confort (...) NO CAMBIAS LO QUE TENÍAS, SINO QUE AÑADES. El cambio es en realidad desarrollo."
Estoy segura de eso. Lo único que me falta es valor, estoy intentando reunirlo, no tengan prisa. Y metérme lo que he puesto en mayúsculas en la cabezota también me falta un poco, para qué nos vamos a engañar

"Tensión emocional VS Tensión creativa: la primera tirará de ti hacia la zona de confort y la segunda te hará AVANZAR hacia el exterior; tendrás que conseguir que tu MOTIVACIÓN salga victoriosa frente a tus MIEDOS; tendrás que trabajar la tensión emocional"
Mi tensión emocional me dice que no puedo tirar a la basura seis años de mi vida. Mi tensión creativa me dice que no estarían tirados a la basura, que algo he aprendido, que lo deje y me forme en lo que realmente quiero. Mi punto intermedio dice que postponga esa decisión hasta dentro de un año y medio. ¿Postponer la decisión es dejar ganar a la tensión emocional? ¿Realmente lo que quiero AHORA es lo que querré dentro de año y medio?

"Al gestionar correctamente tus miedos crecerá tu autoestima, y ésto te dará una NUEVA VISIÓN de la realidad, llena de oportunidades. Así podrás elegir mejor tu objetivo."
Vale, entendido. Gestionaré mis miedos durante año y medio y así quizá mi objetivo haya cambiado y sea mejor. Como he dicho al principio...mis gustos cambiantes me asustan. Quizá sólo es hartazgo lo que me mueve.

"Luego compararás tu punto de partida con tu destino, y es fácil que sientas como si encogieras...Es normal, estarás tomando conciencia de lo que te falta por aprender. Será conveniente que pienses en tu visión personal: ¿Para qué quieres alcanzar tu sueño?"
¿Cómo no voy a encoger, si pienso en volver a los dieciocho años y volver a decidir sueño?
Que...¿Para qué quiero alcanzar mi sueño? Aparte de para ser feliz, como todo el mundo, creo que sería una decisión tomada por las ganas de verme capaz de mandarlo todo a la mierda y empezar de cero. Como cuando coges una práctica, la arrugas y la empiezas otra vez. La rehaces más rápido porque algo has aprendido mientras te equivocabas. Pero hay veces que la que tiraste estaba bien y por rehacerla la estás liando. Y es aquí donde de manera inconsciente vuelve la tensión emocional. Vuelven mis miedos.

"Lo que te falta para volver a experimentar tu sensación de competencia es volver a tu zona de confort a por los recursos personales QUE SIN DUDA TIENES Y QUE CON LAS PRISAS OLVIDASTE UTILIZAR (...) Sé perseverante y POSITIVO"
Lo dicho, que he aprendido mientras me equivocaba. ¿Que sea positiva? ¿En el sentido de pensar que no me estaba equivocando, terminar con esto y pensar en empezar otra cosa si quiero? ¿O en el sentido de pensar que si me tiro a la zona mágica no me estaré equivocando?

"¿Te atreves a soñar?"
¿Quién dijo que soñar es fácil? ¿O era gratis?


 ...soñando con la pierna rota...

Mi conclusión es que si no tomo la decisión de luchar por algo es porque realmente no lo quiero AHORA. Si lo quiero, tarde o temprano terminaré luchando por ello. Eso lo tengo muy claro.